Trucos para aplicar el paisajismo en casa

El paisajismo es el arte de rehabilitar, diseñar y conservar espacios naturales siempre respetando la configuración del medio ambiente. Se trata de representar en tu mente una imagen con el espacio que quieras transformar y trabaja posteriormente en este para conseguir el cambio deseado.

Si tienes un jardín aburrido o un patio que casi no utilizas y quieres sacarles partido, te vamos a dar algunas ideas para llevar a cabo el cambio que andas buscando. Eso sí, antes de poner en marcha tu proyecto te aconsejamos consultes con un profesional que te asesore en cualquier duda que tengas.

5 ideas para aplicar el paisajismo en casa

1. Ten en cuenta lo que necesitas y lo que quieres

Si lo que te gustaría es crear un huerto en tu casa, una estancia para reuniones con la familia o un lugar para las mascotas, confecciona primero una lista donde recojas todo lo que necesitas para llevar a cabo tu proyecto.

2. Conoce la luz que recibe tu jardín

Si vas a transformar un jardín ten presente estos tres aspectos del terreno:

  • Cuántas horas de sol recibe al día.
  • Tiempo que está en sombra.
  • Las zonas que acumulan más agua cuando llueve.

Esto te ayudará a elegir en qué lugares colocar los distintos tipos de plantas.

3. Inspírate en otros ejemplos de paisajismo

Una vez que hayas elegido el jardín que más te guste o el que necesitas, puedes consultar libros de jardinería para conocer aún más sobre tus plantas. Visitar jardines botánicos o buscar por internet te dará ideas. ¡Es sorprendente todo lo que puedes descubrir!

4. Utiliza distintas texturas

No tengas miedo de combinar, por ejemplo, elementos naturales como arbustos y césped, con construcciones de piedra. También puedes atreverte con la mezcla de distintos colores en paredes y otros objetos que formen parte de la decoración de tu jardín.

5. Crea un foco de atención

Lo podemos conseguir colocando una escultura en el centro del jardín o patio, instalando una fuente de piedra o eligiendo una maceta llamativa. Cualquier elemento que destaque y haga que nuestra atención se focalice en ese punto hará más atractivo nuestro espacio. Además, con esto conseguiremos romper la monotonía visual sin perder la cohesión del paisaje.

Como ves, crear o transformar un jardín o un patio en casa no es tarea imposible. Con unas cuantas ideas y aplicando algunos consejos, puedes disfrutar de un nuevo espacio en tu casa. Y si cuentas con el asesoramiento de un profesional, mucho mejor.

El césped y nosotros

A día de hoy no imaginamos un “mundo” sin césped. Un elemento importado desde la cultura y las tierras anglosajonas que se ha vuelto básico en nuestra concepción del jardín. 

Durante siglos hemos disfrutado de jardines sin césped provenientes de civilizaciones como la Mesopotámica, Egipcia, Romana y por supuesto Árabe, con sus mayores exponentes en los fantásticos jardines de la Alhambra de Granada, los Reales Alcázares de Sevilla o el Majorelle de Marrakech. 

Pese a ello, el césped es un elemento totalmente integrado en nuestros jardines actuales, y una pequeña maravilla que aporta una serie de ventajas que vamos a tratar a continuación.

La adaptación es vital

Los céspedes son vegetales ampliamente adaptados a todo tipo de terrenos. Se trata de una especie vegetal ampliamente usada que se ha abierto hueco de manera sistemática en nuestras urbes. Se pueden ver como cobertura para el suelo de rotondas, bulevares, medianas y centros comerciales. 

También se han abierto un hueco en el mundo deportivo con deportes tan mundialmente conocidos e importantes como el fútbol, el béisbol o el tenis, que dedican grandes sumas de dinero y esfuerzo humano para disponer de las mejores especies en sus instalaciones cuidadas con gran mimo.

Ventajas del césped

El uso de céspedes en nuestros jardines y urbes trae consigo una serie de beneficios maravillosos:

  • Aporta frescura: el beneficio psicológico aportado por el contacto con la naturaleza y los parajes naturales en las urbes de asfalto y hormigón es ampliamente estudiado y conocido por los expertos.
  • Transmite paz debido al contacto con la naturaleza al que nos exponemos cuando visitamos un lugar “pavimentado” con esta especie vegetal.
  • Crea una sensación de mayor espacio en nuestros jardines, consiguiendo así disfrutar más de un hogar más amplio.

No hay dos sin tres

A pesar de su dureza y capacidad para tolerar actividades tan intensas como el fútbol, el éxito de su implantación en nuestro jardín (o el lugar donde deseemos tenerlo) depende en gran medida de tres factores:

  • Clima: es importante saber que especie plantar según nuestro clima, ya que existen especies de climas templados como el Lolium o Agrostis, Poas y especies de climas cálidos como el Cynodon, Zoysia, Kikuyos o Bermudas.
  • Mantenimiento y recursos hídricos: conocer la disponibilidad de agua del terreno y la posibilidad de mantenimientos adecuados que podemos aportar es clave. 
  • Preparación del terreno: es imprescindible un adecuado aporte de abono y tierras de calidad junto a una preparación ideal del lugar de plantación o siembra para un correcto crecimiento de nuestro césped. Las características tanto físicas como químicas del terreno son fundamentales si queremos un césped de calidad y no una mera superficie verde.

Hay que tener en cuenta que el mayor coste en el mantenimiento de un jardín deriva de la conservación de nuestro césped, y por ello conviene tener todos estos elementos en cuenta y analizarlos bien. 

A pesar de ser una importación anglosajona, el césped se ha abierto camino en nuestras vidas y se ha servido de sus grandes cualidades para volverse inseparable del concepto de jardín actual. Un vegetal que vive a ras del suelo ha pasado a formar gran parte de nuestra cultura, llegando a ser cimiento ideal de nuestra jardinería moderna.

Consejos para sembrar plantas en un jardín

Conocer el tipo de suelo donde vamos a diseñar nuestro jardín es fundamental para el crecimiento y vida de las especies vegetales. En esta ocasión os hablaremos de algunas de las características que definen al suelo, teniendo en cuenta que existen muchísimas más de igual o incluso mayor importancia como el HP, los nutrientes, salinidad profundidad o materia orgánica.

TEXTURA

Para saber cuál es la textura del suelo en el que vamos a plantar nuestras flores, árboles,… debemos coger un poco de tierra que esté húmeda, pero que no llegue a estar empapada, y apretarla. Si una vez que la hayamos soltado mantiene la forma de nuestra mano, se debe a que contiene arcilla. Y si por el contrario se desmenuza es porque contiene arena.

Debemos tener en cuenta que un suelo arcilloso drena poco y se encharca con facilidad, uno de sus grandes inconvenientes. Sin embargo, es un suelo muy rico en nutrientes.

PROFUNDIDAD

Plantar en un suelo con poca profundidad influirá en el desarrollo de las raíces y por consiguiente la planta tendrá un tamaño más pequeño.

DRENAJE

El drenaje es fundamental en el crecimiento de cualquier especie vegetal, por ello debemos evitar cualquier tipo de encharcamiento. En el caso de que sea inevitable, procuraremos plantar en zonas en las que exista pendiente, instalar tubos de drenaje o añadir arena.